Los dispositivos de telefonía móvil están ahora tan extendidos que son una parte integral de la vida privada y laboral. Sin embargo, la creciente “portabilidad” de los iPhones y los teléfonos inteligentes plantea problemas importantes relacionados con la seguridad y la privacidad. Estos dispositivos, de hecho, son capaces de gestionar una gran cantidad de funciones y almacenar una gran cantidad de datos e información, a menudo confidenciales. Además, la función de comunicación tradicional con frecuencia se delega a varias aplicaciones de mensajería instantánea, gracias a las cuales también es posible enviar archivos de varios tipos. Por este mismo motivo, es necesario prestar la máxima atención a la seguridad de su teléfono móvil, asegurándose de que no sea posible espiar aplicaciones en su dispositivo.
¿Qué son los espías de teléfonos móviles?
Cuando se habla de ‘espías de teléfonos móviles’ se refiere a cualquier dispositivo o software que se utilice para monitorizar las actividades que se realizan en un Smartphone.
En el caso de un dispositivo ‘físico’, se puede mencionar el uso de microchips espía para teléfonos móviles; en esencia, el microchip es una grabadora con dimensiones extremadamente compactas (comparables a las de una tarjeta SIM).
Las características distintivas de este tipo de microchip son la batería, la memoria y la función de activación por voz. Esto último es particularmente importante porque hace que el microchip se active solo en presencia de una señal acústica, aumentando significativamente los tiempos de autonomía y optimizando el espacio de adquisición de grabación.
Una solución más adecuada para los teléfonos de generaciones más modernas, por otro lado, está representada por software y aplicaciones para espiar teléfonos celulares. Dado que la mayoría de los dispositivos modernos también son más compactos, colocar un microchip físico podría ser difícil, si no imposible.
En comparación con un simple microchip, un software espía tiene muchas más funciones y es capaz de recopilar una mayor cantidad de datos e información personal relacionada con todo tipo de actividades realizadas a través del uso del teléfono móvil.
En concreto, mediante un software espía, es posible:
- Leer mensajes de texto, tanto entrantes como salientes: la aplicación puede registrar el contenido del mensaje y registrar los detalles de identificación como la hora y la fecha de envío o recepción.
- Revisar correos electrónicos, registrando los correos electrónicos entrantes y salientes: el software espía puede identificar al remitente o al destinatario, así como la hora y el día en que se envió o recibió el mensaje.
- Acceder al registro de llamadas: el software registra cada llamada recibida o realizada, así como la hora, el número contactado y la duración de la conversación.
- Chequear el historial de navegación de Internet: en este caso, los datos relacionados con las páginas de Internet visitadas se obtienen a través del navegador del teléfono móvil.
- Localización vía GPS: esta función permite localizar en un mapa, de forma bastante precisa, la posición exacta en la que se encuentra el dispositivo.
A estas, que son funciones ‘básicas’, se añaden otras más específicas, como la grabación de llamadas telefónicas (para que luego se pueda descargar y almacenar el archivo de audio) o el entorno circundante.
Además, este tipo de software también puede implementar el control de aplicaciones de mensajería instantánea (WhatsApp y similares) y redes sociales como Facebook, Twitter y otras. Para que funcione correctamente, el software debe instalarse directamente en el teléfono móvil a controlar. Por otro lado, la marca, el modelo y el sistema operativo deben ser compatibles con el dispositivo; de lo contrario, el software no podrá funcionar.
¿Cuáles son los riesgos para una empresa?
La confidencialidad y la privacidad juegan un papel muy importante dentro de una empresa, y en particular para la implementación de estrategias económicas y comerciales. Cualquier filtración de noticias, así como la difusión indiscriminada de datos e información sensible, podría tener un impacto extremadamente negativo en la propia empresa y en las actividades económicas y comerciales relacionadas con ella.
Los datos sensibles pueden incluir estados financieros, planes de estrategia económica, comercial y financiera, lista de proveedores, listas de contactos telefónicos, estudios de mercado y todo lo que sea preparatorio para la implementación de las políticas de la empresa. En el caso de que parte de esta información se haga pública y sea recibida por los competidores, las repercusiones en la empresa serían diferentes, y todas negativas: pérdida de competitividad en el mercado, reducción de clientes, reducción de ingresos y beneficios.
¿Cómo solucionar el problema?
Si el software espía se instala sin el conocimiento de quien posee o utiliza el dispositivo móvil, es recomendable contactar con una agencia de investigación privada, especializada en remediación ambiental y electrónica. Ellos examinan la información que se ha obtenido del teléfono móvil, a fin de identificar actividades sospechosas o infracciones de cualquier tipo.